Por: @lilianacastroledesma
Es tanto lo que se habla y se ha hablado históricamente de la Felicidad y cómo no, si es el anhelo intrínseco de todos nuestros deseos, la búsqueda del placer.
Así que desde temprana edad guiados por nuestros sentidos e impulsados por nuestros constante deseos corremos en búsqueda de esos momentos en que nos sentimos desbordantes de dicha helados, dulces, juegos, muñecos,….vamos creciendo y nuestros deseos crecen con nosotros de un triciclo a una bicicleta y de esta a una moto y porque no a un automóvil…y más
En mi mente siempre está marcado el anhelo de terminar los estudios, la primaria, la secundaria, la universidad, el posgrado…buscando la felicidad a través del conocimiento o de simplemente creerme más grande e independiente…
Es así como creemos que tener algo, alcanzar algo específico, un trabajo, un estatus, una pareja, una familia,….conocer el mundo, nos dará esa tan anhelada Felicidad. El asunto es que logramos todas estas cosas, situaciones y personas y sin embargo esa necesidad de Felicidad no se sacia, sigue tan efímera como desde el inicio.
Estudios de las diferentes universidades en el mundo nos afirman que la felicidad se alcanza:
- Realizando una actividad física
- Disfrutar haciendo lo que nos gusta
- Fomentando nuestro crecimiento personal
- Apreciar lo que tenemos, ser agradecidos
- Admirar y disfrutar de la naturaleza
- Tener familiares y amigos solidarios
- Tratar de ser quienes somos
- Tener sentimientos de comunidad
- Hacer actos bondadosos (altruismo)
En la actualidad existen países que trabajan para que sus habitantes alcancen la felicidad como Butan, cuya meta es “ la felicidad Nacional Bruta”, creen que es responsabilidad del gobierno de crear las condiciones para que la gente sea feliz. Okinawa que es una de las ciudades con los índices de población con más longevidad, donde se mantienen los actos culturales, la vida en comunidad, una buena y sana alimentación como sus mayores secretos.
Desde mi experiencia, es claro que todos estos aspectos son sanos y necesarios para una vida equilibrada, ya que refuerzan las tendencias mentales más elevadas de los seres humanos, nos genera una sensación de seres buenos. Sin embargo como la tendencia mental humana es infinita solo puede ser saciada con algo infinito, si, tal cual infinito. Y resulta que solo existe algo infinito, la Conciencia Suprema, y esta no se encuentra en ningún lugar u objeto físico, es algo que solo puede ser encontrado individualmente en lo más profundo de nuestro ser.
Para ello existe una técnica científica y psicológica cuya efectividad data de hace miles de años y es la Meditación que le permite a la mente llegar a elevados estados de conciencia, donde reside la esencia de la felicidad, les puedo decir que esta práctica ha cambiado mi vida.
